En 2024, el inicialista venezolano mantuvo una racha de cuatro meses sin poncharse, alcanzando su tope personal de 141 apariciones consecutivas sin ponches, la cuarta mayor en la historia de las Grandes Ligas.
El beisbolista venezolano Luis Arráez sigue consolidándose como uno de los bateadores más difíciles de ponchar en las Grandes Ligas. Actualmente, el «Come dulce» acumula 103 apariciones consecutivas sin recibir un ponche en la presente campaña, una racha que no ha sido rota desde el pasado 25 de mayo.
Arráez ha logrado esta impresionante marca en 277 turnos al bate, habiendo sido ponchado en solo cinco ocasiones en toda la temporada. Estas cifras lo colocan como el jugador con menos ponches en comparación con cualquier otro que haya tenido un número similar o mayor de turnos, evidenciando su excepcional disciplina en el plato.
Para los lanzadores rivales, el criollo es un verdadero «hueso duro de roer». Aunque pueda fallar con un rodado al cuadro o un elevado a los jardines, abanicar el tercer strike o verlo pasar no son formas comunes en las que Arráez regresa al dugout.
Es notable que la mayoría de los jugadores que esta temporada han sido ponchados cinco veces o menos tienen, como máximo, 70 apariciones al plato. Esto sugiere que aquellos con pocos ponches suelen ser jugadores con menor regularidad, mientras que quienes tienen un número de turnos similar o superior al de Arráez registran al menos 19 ponches.
Cabe destacar que, en 2024, el inicialista venezolano mantuvo una racha de cuatro meses sin poncharse, alcanzando su tope personal de 141 apariciones consecutivas sin ponches, la cuarta mayor en la historia de las Grandes Ligas. En esta prestigiosa lista, Arráez se encuentra junto a leyendas como Dave Cash (récord con 254 turnos en 1976), Nellie Fox (185 en 1962), Tony Gwynn (170 en 1985) y Juan Pierre (147 en 2004).
Líder-RZ.