Entre las empresas mencionadas por Bloomberg, a través de un documento interno de Pdvsa, se encuentran Aldyl Argentina SA y las firmas chinas Anhui Guangda Mining Investing Co. y China Concord Resources.
En un esfuerzo por mantener el flujo de divisas y llenar el vacío dejado por la salida de grandes petroleras occidentales, Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa) ha firmado al menos nueve nuevos acuerdos con proveedores de servicios extranjeros, incluidas dos empresas chinas. Así lo reporta la agencia Bloomberg, citando fuentes familiarizadas con los contratos. Esta estrategia surge luego de que las sanciones de Estados Unidos obligaran a la petrolera Chevron a finalizar su producción en el país.
Nuevas reglas de juego y actores emergentes
Estos nuevos contratos, según la nota de Bloomberg, permiten a las empresas operar pozos ya perforados y les otorgan el derecho exclusivo de venta de la producción. Esto representa un cambio significativo respecto a la práctica tradicional, donde Pdvsa mantenía los derechos comerciales exclusivos. Las fuentes, que pidieron el anonimato al tratarse de acuerdos privados, destacaron esta flexibilización.
Sin embargo, al menos una de las empresas decidió no continuar en el proyecto tras no poder obtener una licencia estadounidense para operar en Venezuela, lo que subraya los desafíos que aún persisten debido al régimen de sanciones.
Los acuerdos ilustran la estrategia del presidente Nicolás Maduro para impulsar la economía y mitigar el impacto de la negativa del gobierno de Donald Trump a extender las licencias que permitían a grandes petroleras occidentales operar en el país. «Pdvsa tiene un plan para seguir produciendo petróleo a pesar de las medidas coercitivas unilaterales de Estados Unidos», declaró la vicepresidenta y ministra del Petróleo, Delcy Rodríguez, el 29 de mayo. Pdvsa y el Ministerio de Hidrocarburos no han emitido comentarios al respecto.
Detalles de los acuerdos y empresas involucradas
Los nuevos acuerdos estipulan que cada una de las empresas extranjeras obtendrá el control de al menos un bloque de terreno en el estado Zulia o en la Faja Petrolífera del Orinoco, las dos regiones petroleras más ricas de Venezuela. La estatal venezolana mantendrá una participación de al menos el 50% en el crudo producido (el porcentaje exacto varía según el bloque), mientras que la empresa asociada se encargará de todas las operaciones y de su parte de las ventas de petróleo. Un incentivo adicional es que estas empresas extranjeras estarán exentas de algunos impuestos, y Pdvsa financiará su parte de las inversiones con crudo.
Entre las empresas mencionadas por Bloomberg, a través de un documento interno de Pdvsa, se encuentran Aldyl Argentina SA y las firmas chinas Anhui Guangda Mining Investing Co. y China Concord Resources. Una empresa estadounidense, North American Blue Energy Partners, una unidad del Grupo de Gestión Petrolera Global del magnate energético Harry Sargeant III, habría firmado un acuerdo, pero luego decidió no seguir adelante al no obtener la licencia necesaria. Representantes de estas compañías no han respondido a las solicitudes de comentarios de Bloomberg.
«La única manera en que Venezuela puede mantener y aumentar su producción es apoyándose en empresas privadas locales e internacionales a las que no les importan las sanciones estadounidenses», declaró en una entrevista el diputado William Rodríguez, miembro de la comisión de energía de la Asamblea Nacional. «A diferencia de 2019, cuando las sanciones comenzaron, existe un marco para operar al margen del sistema bancario estadounidense y un mercado estructurado con países aliados, como China, Irán y Rusia», añadió Rodríguez.
Banca y Negocios-RZ.