El resultado de la votación será crucial, ya que no solo impactará a la actual administración, sino que también redefinirá el equilibrio de poderes militares entre la Casa Blanca y el Capitolio en la era de los conflictos globales.
El Senado de Estados Unidos ha iniciado un intenso debate sobre la Resolución Schiff-Kaine, un proyecto de ley impulsado por los senadores demócratas Adam Schiff y Tim Kaine que busca restringir la autoridad del presidente Donald Trump para ordenar ataques militares preventivos sin una aprobación formal del Congreso. La medida ha desatado una confrontación política sobre el equilibrio constitucional de poderes en materia de guerra.
La Fuerte Crítica del Secretario de Estado Marco Rubio
El principal y más vocal opositor a la resolución ha sido el secretario de Estado, Marco Rubio. Utilizando su cuenta en X, Rubio emitió un fuerte pronunciamiento advirtiendo de las consecuencias directas para la seguridad nacional:
“La resolución Schiff-Kaine se somete a votación en el Senado hoy. Esta resolución apunta a despojar al Presidente Trump de su autoridad constitucional para proteger a los estadounidenses autorizando ataques militares contra narco-terroristas, los hutíes y otros proxies iraníes. Esto es peligroso: pone en riesgo a nuestros niños, ciudadanos, soldados y aliados.”
Rubio y otros republicanos argumentan que esta restricción paralizaría al Comandante en Jefe al negarle la velocidad y la discreción necesarias para responder a amenazas que evolucionan rápidamente, especialmente aquellas que involucran a actores no estatales y guerras híbridas. Su postura es que el Presidente necesita flexibilidad para actuar de manera decisiva.
El Corazón Constitucional de la Controversia
La Resolución Schiff-Kaine tiene como objetivo limitar la capacidad del Ejecutivo para usar la fuerza militar contra amenazas específicas sin una autorización legislativa formal. Los demócratas, que impulsan la medida, argumentan que el poder ejecutivo ha excedido históricamente su autoridad en la toma de decisiones militares, ignorando el Artículo I de la Constitución, que otorga al Congreso el poder de declarar la guerra.
Los defensores, como el senador Kaine, buscan restaurar el control del Congreso sobre el inicio y la escala de los conflictos, y han sido una voz constante a favor de revocar antiguas Autorizaciones para el Uso de la Fuerza Militar (AUMF).
El resultado de la votación será crucial, ya que no solo impactará a la actual administración, sino que también redefinirá el equilibrio de poderes militares entre la Casa Blanca y el Capitolio en la era de los conflictos globales.
Con Informacion del Publico TV.