El presidente de Fedenaga sostuvo que los remanentes de carne que podrían destinarse a la exportación están siendo dirigidos al mercado interno.
Edgar Medina, presidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga), reafirmó el compromiso de los productores ganaderos venezolanos con el país, asegurando que están abasteciendo el mercado nacional con carne. Sin embargo, destacó una preocupación: el consumo per cápita en Venezuela «se ha estancado, ha venido un poco hacia la baja producto precisamente también de la situación en el cambio de la moneda».
Medina señaló que, desde hace más de un año y medio, los ganaderos han mantenido los precios de la carne a puerta de corral, oscilando entre US$ 1,95 a US$ 2,10 el kilo. «A los productores se les ha pagado siempre el mismo precio, no lo hemos incrementado», afirmó, añadiendo que la variación en el precio final la experimenta el consumidor en los expendios de carne.
Prioridad al mercado nacional y repoblación de hatos
El presidente de Fedenaga sostuvo que los remanentes de carne que podrían destinarse a la exportación están siendo dirigidos al mercado interno. «Primero el país, tenemos que abastecer el mercado nacional», expresó. En ese sentido, mencionó las reuniones con el ministerio, las autoridades y la Vicepresidencia para «traer a Venezuela vientres para repoblar los hatos ganaderos».
Necesidad de clasificar el ganado
Medina puntualizó que en Venezuela no solo se consume carne de toro, sino también de vaca, búfalo y novilla, entre otros. «Hay una serie de productos dentro de lo que es el tema de la carne que tiene diferentes precios y eso también lo hemos venido hablando a nivel del ministerio para que se haga una clasificación general del ganado», indicó. El objetivo es que el consumidor final «sepa si está comiendo búfalo, vaca o toro» al momento de adquirir el producto.
Preocupación por el precio de la leche
Finalmente, en declaraciones a Unión Radio, Medina enfatizó que los productores también enfrentan problemas con el precio de la leche, debido al «tema del agua en los potreros», lo que ha «pechado mucho al productor de leche».
«Esto trae una consecuencia que se le está pagando muy por debajo de lo que debe costar un litro de leche a puerta de corral y los productores no tienen la capacidad de producir la leche necesaria para seguir abasteciendo el mercado nacional», concluyó.
Banca y Negocios-RZ.