El exsenador señaló que, a pesar de contar con décadas y un presupuesto «casi ilimitado» de los contribuyentes para promover la influencia estadounidense, fomentar el desarrollo económico global y ayudar a miles de millones de personas a alcanzar la autosuficiencia, los resultados de USAID han sido «insatisfactorios».
Marco Rubio, Secretario de Estado de Estados Unidos, ha anunciado el cierre de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) como el principal ejecutor de la asistencia exterior. A partir de hoy, 1 de julio, la administración de los programas de ayuda internacional se transferirá al Departamento de Estado, prometiendo mayor responsabilidad, estrategia y eficiencia.
«Esta era de ineficiencia sancionada por el gobierno ha llegado oficialmente a su fin», afirmó Rubio en una columna publicada en el sitio web de la Secretaría de Estado. Según el funcionario, los programas de ayuda exterior que se alineen con las políticas de la administración y promuevan los intereses estadounidenses serán ahora gestionados directamente por el Departamento de Estado.
Argumentos para el cambio
Rubio argumentó que todo servidor público tiene la obligación de garantizar que los programas financiados con fondos públicos beneficien los intereses nacionales. Explicó que una revisión exhaustiva, realizada durante la administración Trump, de miles de programas y más de $715 mil millones en gastos ajustados por inflación a lo largo de décadas, reveló que USAID no cumplió con este estándar.
El exsenador señaló que, a pesar de contar con décadas y un presupuesto «casi ilimitado» de los contribuyentes para promover la influencia estadounidense, fomentar el desarrollo económico global y ayudar a miles de millones de personas a alcanzar la autosuficiencia, los resultados de USAID han sido «insatisfactorios».
En su columna, Rubio sostuvo que, más allá de la creación de un «complejo industrial de ONG a escala global a expensas de los contribuyentes», USAID tiene «poco que mostrar desde el final de la Guerra Fría». El funcionario concluyó que «los objetivos de desarrollo rara vez se han cumplido, la inestabilidad a menudo ha empeorado y el sentimiento antiestadounidense solo ha crecido».
La Patilla-RZ.
